POR PABLO BAROFIO DESDE CORDOBA..
Al menos en Argentina, la gran mayoría de los apicultores que conozco manejan muy bien el tema Varroa desde hace mucho y reconocen cuando un apiario perdió rentabilidad por no curar en forma, sea por el clima, los propios tiempos del apicultor, o factores económicos. Es decir, hemos aprendido a convivir con este mal.
Incluso la mayoría tiene siempre un “as” bajo la manga, una medida de emergencia a la cual recurre si llega el caso, y sin embargo las abejas siguen desapareciendo, aunque según lo que he podido hablar con algunos, en la anterior campaña y lo que va de esta, mucho menos que en otros años.
A vuelo de pájaro, las mayores bajas se presentan en los años de bajos rindes, quizás porque el factor nutricional inclina la balanza.
El problema es que faltan datos, relevamientos que evidencien si las colmenas más próximas a cultivos intensivos son las mas afectadas o no.
Cuando estuve trabajando en el norte, mas concretamente en Catamarca y Tucumán, con 100 por ciento africanizadas, Varroa prácticamente no existe si uno se mantiene en esa línea genética y se logra adaptar a los manejos (o no manejos mejor dicho) de este tipo de abeja. Es decir, hay Varroa pero en porcentajes que no superan el 1 ó 2 por ciento sin tratamiento.
Aun así, con colmenas sanas, bien nutridas y pobladas, cuando uno se arrima a campos con cultivos intensivos como la soja o el maíz, que ya se han adueñado también de aquellos campos otrora cañeros o tabacaleros, aun sin Varroa, se presentan problemas de despoblamiento, donde quedan la reina y solo un puñado de abejas, con toda la miel casi intacta (sin pillar aun después de varios días).
¿Habrá alguien que se interese o que se anime también a estudiar esto a un nivel científico para darle rigor y validez oficial?
FUENTE; http://api-cultura.com/despoblamiento-de-colmenas/
No hay comentarios:
Publicar un comentario